sábado, 11 de abril de 2015

Vaquita marina.

Phocoena sinus



La vaquita vive únicamente en las extensiones del norte del Golfo de California en México, también conocido como el Mar de Cortés. Es endémica del Alto Golfo de California en México y no hay indicio de su presencia al sur por lo que se plantea que ésta ha sido su distribución original. Solo vive en una región pequeña, al norte de una línea imaginaria que conecta Puertecitos en Baja California y Puerto Peñasco en Sonora. Vive en aguas cálidas y poco profundas de entre 11 a 50 m, con una visibilidad de 0.9 a 12 m y a una distancia de la costa de 11 a 25 km.

Distribución de la Vaquita Marina

La Vaquita es el único mamífero marino originario de México y el más pequeño de los cetáceos. Es robusta, con las aletas pectorales largas y cóncavas; aleta dorsal alta, triangular y ligeramente falcada (curvada hacia atrás). Su cabeza es redondeada y su hocico corto. Su dorso es de color gris oscuro, con zonas laterales gris claro y vientre blanco. Tiene parches negros alrededor de los ojos y los labios.

La hembra es ligeramente más larga, alcanzando hasta 1.5 m, mientras que el macho mide 1.4 m. Su peso alcanza 55 kg en la hembra adulta. Tiene dientes con forma de espátula, 17 a 21 en la mandíbula superior y 17 a 20 en la mandíbula inferior.

Se alimenta, principalmente de peces, calamares y camarones, los cuales son abundantes en el Alto Golfo de California. 

La Vaquita se reproduce cada dos años o más. Se aparean entre abril y junio, y nacen entre febrero y abril. Las crías recién nacidas miden de 70 a 78 cm y pesan al menos 7.5 kg. Su periodo de gestación es de entre 10 y 11 meses. Dan a luz una sola cría y la madurez sexual es de alrededor de seis años. 


La vaquita, cuyo nombre significa “vaca pequeña”, fue descubierta por primera vez en 1958 y descrita hasta 1985. Esta especie cautelosa y evasiva está desapareciendo debido a capturas incidentales en redes de arrastre. Estas redes de pesca son casi invisibles, están en el agua como una especie de cortina que seguido, los costeros las dejan de vigilar y las dejan para la pesca de camarón. Las vaquitas no son capaces de detectar las redes, por lo tanto, se enredan y ahogan al quedar atrapadas nadando accidentalmente dentro de ellas. Como las ballenas y los delfines, necesitan salir a la superficie para poder respirar. Las redes de pesca de arrastre son la principal causa de muerte de la vaquita marina.

Robert Pitman , del Centro de Pesca Marino del Suroeste de la NOAA lo refleja en el artículo de la revista Historia Natural en 2007, titulado “¿Cómo ahora vaquita?”: “La vaquita no tiene valor como mercancía: Es muy pequeña y asustadiza para participar en una aventura de ecoturismo. No es un eslabón vital en la cadena alimenticia marina. No existe cura para alguna enfermedad humana escondida en las proteínas de su hígado. Es sólo una bestia humilde tratando de hacerse camino, como el resto de nosotros. Su pérdida apenas se notaría. Sin embargo, es parte de la magnífica diversidad de vida en la Tierra que nuestra generación heredó, y se está convirtiendo rápidamente, en parte del escaso legado que estamos dejando atrás. Ahora tenemos un año o dos para decidir si dejaremos que esta especie viva, si la sacaremos de la isla y borraremos para siempre esa pequeña sonrisa de color negro de la faz de la Tierra. 

Desafortunadamente, la vaquita está en la lista de especies en peligro de extinción de México así como en la lista roja de especies en peligro de extinción (IUCN) Unión Internacional de la Lista Roja para la Conservación de la Naturaleza. Los científicos calculan que queda un estimado de 125 a 150 ejemplares. Se espera que la población disminuya cada vez más hasta la extinción si no se encuentran soluciones inmediatamente. 

El gobierno mexicano emprendió un plan de dos años para remover las redes del agua y así salvar a la vaquita. Sin embargo, la compra de las zonas pesqueras está dispuesta para tener un impacto significativo en las familias de un área de oportunidades económicas limitadas y en donde la pesca, en la actualidad, es la única fuente de ingresos. Para poder salvar a la vaquita, los pescadores del Golfo superior de California también tienen que ser supervisados. La pregunta es, ¿cómo va a funcionar esto? 

En su última hora, la vaquita necesita que el mundo escuche. Sin voz o una presencia visible real con la que pueda hacerse presente en la mente de la humanidad, es momento de una cooperación internacional y una acción rápida a su favor. 





Referencias: 


-Acerca de la Vaquita marina, 2015. Consultado el 7/04/2015 (http://vaquita.tv/es/sobrea-la-vaquita-marina/) 

-Vaquita marina. Consultado el 11/04/2015 (http://www.biodiversidad.gob.mx/especies/especies_priori/fichas/vaquitaMarina.html)




1 comentario:

  1. La vaquita marina me parece un animal muy bonito, es una lástima que se este extinguiendo por la sobreexplotación en la pesca, pues realmente no se comercializa con ella sino que muere mientras cazan otros animales. Actualmente hay muchas campañas para salvaguardar a la vaquita marina. Es un ejemplar muy bonito físicamente, y espero que no llegue a la extinción C: buena información.

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